Las acciones para eliminar o reducir las violencias combinan cambios personales, comunitarios y de políticas públicas. Ninguna medida aislada basta, pero varias, juntas, sí logran disminuir de forma importante la violencia en diferentes contextos.
Cambios a nivel personal
- Educar en el respeto, la empatía y la resolución pacífica de conflictos desde la infancia, en la familia y la escuela.
- Cuestionar estereotipos de género, actitudes machistas y otras formas de discriminación (por ejemplo, hacia personas migrantes, con discapacidad o de otros grupos marginados).
- Aprender a identificar señales tempranas de violencia (control, humillaciones, celos excesivos, aislamiento) y pedir ayuda a tiempo en servicios de apoyo disponibles.
Acciones en la escuela y la comunidad
- Implementar programas educativos que trabajen igualdad de género, habilidades socioemocionales y prevención del acoso, incluido el ciberacoso.
- Crear mecanismos seguros y confidenciales de denuncia en escuelas, barrios y espacios comunitarios, y garantizar que se actúe de forma rápida y protectora.
- Desarrollar actividades comunitarias (talleres, campañas, grupos juveniles) que promuevan la no violencia, el buen trato y la participación de niños, adolescentes y hombres como aliados.
Políticas y sistemas de protección
- Fortalecer leyes que sancionen la violencia (de género, sexual, física, psicológica, institucional) y asegurar que se apliquen sin impunidad.
- Garantizar servicios integrales para víctimas: atención médica y psicológica, asesoría legal, refugios, apoyo económico y programas para recuperar autonomía.
- Diseñar políticas que reduzcan desigualdades estructurales (pobreza, exclusión, falta de acceso a educación, salud y empleo), ya que son factores que alimentan muchas formas de violencia.
Transformar normas y cultura
- Impulsar campañas de sensibilización permanentes contra la violencia machista, la violencia sexual, el bullying y otros tipos de violencia, dirigidas especialmente a jóvenes.
- Promover modelos positivos de masculinidad basada en el cuidado, la corresponsabilidad y el rechazo a la violencia.
- Trabajar con medios de comunicación, redes sociales y líderes comunitarios para desalentar mensajes que normalizan la violencia y reforzar aquellos que promueven igualdad y respeto.
Si indicas de qué tipo de violencia estás hablando (por ejemplo, escolar, de género, familiar, comunitaria), es posible concretar aún más las acciones específicas para tu contexto.
